Incremento del riesgo de ACV en jóvenes durante la pandemia


 La COVID-19 ha cambiado el panorama en muchos países. Esta enfermedad continúa propagándose por todo el mundo. Las personas con factores de riesgo, niños y adultos mayores con problemas cardiacos, obesidad o diabetes son la población más vulnerable. Sin embargo, cada vez más jóvenes se contagian, llegando a presentar también un infarto cerebral como complicación de la infección.

El Ataque Cerebrovascular (ACV) es relativamente frecuente en pacientes con COVID-19. Antes de la pandemia, según estadísticas globales, cada 2 segundos una persona sufría un ACV. En la actualidad la situación es distinta. Ahora ocurre cada 1.2 segundos, casi duplicando la incidencia2, indica el Dr. Médico Neurólogo, Luis Yépez del Hospital del Norte Los Ceibos.
Esta patología afecta a todos por igual. Por lo que es importante que los adultos jóvenes estén atentos a los síntomas a fin de identificarlo oportunamente. La evidencia científica demuestra que cuando una persona no actúa de manera rápida frente a un infarto o derrame cerebral, suele tener secuelas de por vida.
Un ACV ocurre cuando el flujo de sangre en el cerebro se ve afectado, es decir, no hay una correcta irrigación sanguínea. Lo que lo priva de oxígeno y deja de funcionar de manera adecuada. Esta condición puede incluso provocar la muerte. 
Una reciente investigación de la Universidad de Western Ontario en Canadá, que hizo una revisión sistemática de estudios publicados en revistas científicas de los ataques cerebrovasculares asociados al virus COVID-19, encontró que alrededor de 2 de cada 100 personas hospitalizadas, por este tipo de coronavirus, sufren un ACV antes o durante su hospitalización. Este estudio que incluía el análisis de160 pacientes, 57% hombres y 43% mujeres, de los cuales 29 eran menores de 50 años, evidenciaría que el 1,8% de incidencia es relativamente alto en comparación con el porcentaje registrado en pacientes hospitalizados por otras infecciones respiratorias virales3.
El Dr, Luis Yépez, explica que muchos de los pacientes jóvenes no reconocen las señales de alerta de un ACV. “Es muy importante identificar sus signos, a fin de actuar con rapidez. Cuando más pronto se administre el tratamiento, existen más posibilidades de minimizar el daño”, subraya.
¿CÓMO DETECTARLO DE MANERA RÁPIDA?
El especialista nos brinda las siguientes pautas para reconocer los síntomas de esta enfermedad:   
  • Parálisis o adormecimiento repentino en la cara.
  • Entumecimiento de un brazo o una pierna, en un mismo lado del cuerpo.
  • Dificultad al hablar: Confusión repentina para decir frases cortas o entender a otros.
  • Desequilibrio al caminar: Mareos y/o pérdida de la coordinación.
  • Dolor de cabeza fuerte y repentino sin motivo aparente.
Si presenta cualquiera de estos síntomas, la persona debe acudir de inmediato al centro de salud más cercano para ser tratado por un especialista. Debe llegar antes de las primeras 4.5 horas de presentar el primer signo, para tener más posibilidades de no presentar secuelas.

Comentarios

Entradas populares