Del Black Friday al Green Friday: La importancia del consumo responsable

 


A nivel mundial, los últimos meses del año están tradicionalmente marcados por un auge del consumismo, que surge a partir de festividades como el Día de Acción de Gracias, la Navidad y el Año Nuevo. El conocido Black Friday, por ejemplo, se caracteriza por rebajas significativas en tiendas minoristas y almacenes, que motivan a la ciudadanía a adquirir productos y/o servicios masivamente, sin medir las posibles consecuencias que ello puede tener.

 

Frente a ese panorama, aparece el Green Friday, una iniciativa cuyo concepto de consumo responsable y sostenible tiene como principal objetivo promover la conciencia al comprar. “Esto abarca algunas aristas como adquirir únicamente lo que sea necesario, y de preferencia, optar por productos sostenibles, amigables con el medioambiente, y de producción local; es decir, apostar por el reciclaje, el pequeño comercio y los productos de segunda mano, en lugar de las compras impulsivas que incitan los descuentos del Black Friday”, explica Katarina Zdraljevic, Jefe de la Unidad de Gestión Ambiental de Banco ProCredit.

 

Debido a la importancia que tiene el consumo responsable en el contexto mundial actual, la representante de Banco ProCredit detalla a continuación algunos aspectos esenciales para entender y poner en práctica acciones que contribuyan a fortalecer el Green Friday.

 

Sobre el Black Friday y sus efectos

 

      El Black Friday surgió en los Estados Unidos como una fecha representativa del inicio de la temporada navideña, y en la que muchas empresas ofrecen grandes descuentos, con la finalidad de impulsar significativamente sus ventas.

 

      Este consumo excesivo tiene un efecto directo en el ambiente, que está relacionado con el uso desmesurado de recursos naturales para la producción, lo que genera residuos y contaminación del medioambiente por el corto uso de los productos. “Estos recursos se utilizan irresponsablemente para poder ofrecer precios más económicos, y lo que es igualmente preocupante, existen compañías que implementan prácticas laborales precarias e ilegales para este fin”, puntualiza la especialista.

 

      En el ámbito social también pueden surgir consecuencias negativas, siendo la más común el sobreendeudamiento. “Promociones, descuentos y ofertas de financiamiento a largo plazo pueden parecer atractivas, pero si no existe una planificación financiera previo a adquirir productos y/o servicios en esta fecha, las personas a futuro pueden verse impedidas de cubrir los valores con los que se endeudaron, y acarrear todos los problemas que surgen con ello”, advierte la experta de Banco ProCredit.

 

Sobre el Green Friday y sus ventajas

 

      El Green Friday trae consigo múltiples beneficios. En primera instancia, se reduce considerablemente la generación de residuos y su disposición en los rellenos sanitarios. “Esto es importante, particularmente con la ropa y los dispositivos electrónicos, que a más de ser los más apetecidos en esta temporada, demandan un reciclaje especial”, señala Zdraljevic.

 

      Aunque no muchos son conscientes de ello, varias empresas producen prendas de vestir de baja calidad para aumentar su margen de ganancias en esta época. Eso contribuye a la “moda rápida”, un modelo de negocio que implica la producción de ropa en grandes cantidades y en corto tiempo, sin importar los daños que puedan causar al medio ambiente. “Contrario al Black Friday, el Green Friday motiva a los consumidores a adquirir ropa de segunda mano o de materiales naturales y reciclados, y al hacerlo, no solo aportamos al cuidado del planeta, sino que mejoramos la economía del hogar.”

 

      Evitar el consumo desmesurado y no planificado coadyuva a mantener un estado financiero saludable. “La idea detrás del Green Friday es también incentivar la responsabilidad en las decisiones de compra, y eso, por supuesto, se traducirá en una mayor tranquilidad económica, al evitar el endeudamiento irresponsable e innecesario”, remarca la ejecutiva de Banco ProCredit.

 

      El fortalecimiento de este movimiento sostenible demanda un compromiso de varios actores, entre esos, del sector privado. “Desde una perspectiva empresarial, sumarse a la iniciativa del Green Friday le demuestra a los consumidores que la compañía o marca tiene un compromiso con el medioambiente, que es responsable, que aplica buenas prácticas laborales, y que busca promover la salud y bienestar de sus consumidores a largo plazo”, dice Zdraljevic.

 

      En cuanto a las instituciones financieras, de igual manera pueden tener una incidencia en la acogida que pueda tener el Green Friday. “Los bancos tienen la capacidad de impulsar proyectos en conjunto con marcas sostenibles, y promoverlos entre sus clientes”, indica la especialista. “Además, tal como lo hacemos desde Banco ProCredit, podemos educar a nuestros clientes en temas financieros, con un énfasis en los beneficios del ahorro”, añade.

Comentarios

Entradas populares